El Estado venezolano tiene la obligación de humanizar las cárceles que permitan al delincuente regenerarse, estudiar, recibir herramientas para una vez obtenida su libertad poder ingresar al mercado laboral y llevar una vida decente.
(Prensa 08/09/10).- Wilfredo Feo Krischke, coordinador general del Centro de Diagnóstico para la Prevención de la Inseguridad Ciudadana (CDPIC), rechaza las declaraciones emitidas por el general Antonio Benavides, comandante del Core 5, en las que sostiene que “el destino de un delincuente es ir a la cárcel o estar bajo tierra” , porque demuestra que el gobierno está dando un tratamiento represivo del tema de la inseguridad, sin abordar las verdaderas causas sociales que originan el incremento del número de delincuentes, tales como abandono de la escolaridad, desempleo, impunidad y los retardos procesales”.
“En los últimos días hemos visto como sacan tanquetas y militares a la calle para frenar el auge del hampa. En primer lugar hay que destacar que los militares están preparados para la guerra, no para estar en la calle combatiendo delincuentes. Por otro lado, se está abordando el problema de la inseguridad bajo los parámetros de la represión y la confrontación, lo cual no dará los frutos deseados porque la inseguridad requiere de un plan estructural que abarque el problema social que la genera: los muchachos que desertan de la escolaridad, la posesión de armas ilícitas por parte de la población, el drama de las cárceles donde los privados de libertad no tienen oportunidad de regenerarse para una vez obtenida la libertad ingresen al mercado laboral, los retardos procesales y el desempleo”.
Feo Krischke agrega que las declaraciones del comandante del Core 5 ponen de manifiesto que los encargados del Dispositivo Bicentenario de Seguridad desconocen el drama estructural que representa la inseguridad, además de incentivar la violación de derechos humanos, ya que en Venezuela existe el principio de presunción de inocencia.
“El tema de inseguridad amerita un amplio debate, la participación de todos los actores involucrados, es decir, las autoridades nacionales, locales y regionales, los expertos en la materia y las comunidades, para de esa forma crear un plan de seguridad integral que abarque los factores sociales, educativos, culturales, penitenciarios, policiales”.
Por último, el coordinador general del Centro de Diagnóstico para la Prevención de la Inseguridad Ciudadana (CDPIC), recordó al general Benavides que las cárceles venezolanas son centros donde priva el hacinamiento y por ende la violencia, la violación de los derechos humanos, lo cual imposibilita que el recluso salga de allí regenerado, con un oficio que le permita reinsertarse a la sociedad.
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